El más rudo de los montañeses, el más elegante de los luchadores.
Su padre era un guerrero japonés que de viaje por China encontró a una hermosa muchacha con la
que contrajo matrimonio con lo que decidió quedarse a vivir en la tierra de la chica, junto a su padre,
un ex-guerrero. En medio de la felicidad de la vida en el campo, nació Kazuya. Al poco tiempo
su abuelo descubrió una extraña marca en el dorso de su mano, era la figura de un panda, por ello
buscaron y adoptaron una cría de este animal y la llamaron Akuma (que en el dialecto de su abuelo
significa "Vago y Glotón").
Mientras era un niño, el padre de Kazuya fue requerido por su maestro japonés, que necesitaba de su
mejor discípulo ya que su vida estaba en peligro.El pequeño Kazuya permaneció en Sichuán junto a su abuelo Sihera
mientras sus padres viajaban a Japón. Nunca más les volvió a ver, aunque ha recibido alguna carta de ellos a través
de un monje de la región, Miguel .
Kazuya está nervioso porque sus padres le han preparado el matrimonio con una joven noble japonesa,
de la familia del maestro de su padre. Este enlace es muy importante para los padres de Kazuya y
el lo comprende, pero muchas veces piensa que el preferiría elegir su propia vida. Sólo le queda
un mes hasta que conozca a su futura esposa.
Kazuya aprendió la técnica de la lucha de manos (y pies) de su abuelo Sihera, aprendió el estilo
de la grulla (lo que hace pensar que su abuelo fue un monje de Shaolin) para el que tiene un talento
inusual, además aprendió el estilo del Panda, un estilo sencillo y
directo desarrollado por su abuelo.
A pesar de su aptitud para la lucha, Hwon es un chico tímido que prefiere la vida del campo. Ahora
viaja por el mundo con Akuma, pero sigue siendo más bien callado. Adquirió cierta fama hace unos
años cuando venció en algunos torneos regionales sin ser muy conocido y con su extraño estilo.
En el Tibet, Kazuya descubre que su abuelo Sihera es prisionero de la grulla bicéfala Wheng Thou.